Iglesia de Liebfrauenkirche de Zúrich

Una mirada al pasado

A lo largo del siglo XIX hubo un importante crecimiento en el número de católicos en Zúrich, por lo que la Iglesia de San Pedro se quedó pequeña en un abrir y cerrar de ojos. Ante esta creciente demanda, se encargó la construcción inmediata de la Liebfrauenkirche, que se vería finalizada en un tiempo récord.

La rápida construcción del templo, unida a la falta de fondos, hicieron que en sus comienzos la iglesia contara con una decoración simple, pero con el paso de los años se fueron añadiendo coloridos frescos y mosaicos.

Al contar con una ubicación tan céntrica, la iglesia no tardó en adquirir una gran importancia para los ciudadanos católicos de Zúrich, encargándose de la creación de escuelas, hospitales y numerosas asociaciones.

Con el paso del tiempo la parroquia de Liebfrauen ha continuado creciendo y en la actualidad cuenta con cerca de 5.000 fieles, por lo que se trata de una de las parroquias católicas más grandes de Zúrich.

La iglesia de un vistazo

Desde el exterior, la Iglesia de Liebfrauenkirche de Zúrich llama la atención por su imponente y sobrio aspecto coronado por una gran torre (según el diseño iban a ser dos torres, pero por temas de presupuesto solo se llegó a construir una).

Una vez dentro, nos encontramos con un templo de grandes dimensiones con una extensa nave central coronada por altos techos formados por estructuras de madera y, separadas por grandes arcadas y pilares macizos, se pueden ver dos naves laterales de menor extensión.

Imponente y armoniosa

La Iglesia de Liebfrauenkirche es uno de los edificios más llamativos de Zúrich y merece la pena hacerle una visita, aunque a menudo pasa a un segundo plano al hablar de las iglesias de la ciudad, ya que cuenta con templos muy importantes que le hacen sombra como son la Iglesia de Fraumünster y la Iglesia de Grossmünster.